El análisis desde el judaísmo, de algunos de los recientes más impactantes tópicos de debate social y legal dados en la Argentina, muestra el establecimiento no sólo de una cultura del self sino también de la simulación. Allí, la voluntad sometida al irrestricto afán desiderativo más la consideración de la ficción como realidad, provoca la sanción de leyes bajo una realidad tergiversada en pos de no coartar el arbitrio y antojo del ser humano, desconsiderando las graves consecuencias de ello.